Parece que el tiempo se acelerase cuando entras en un local de ensayo. El sábado 30 estuvimos ensayando casi 9 horas Private Room y me faltó tiempo.
Sobre todo estuvimos ensayando los coros Ezequiel y yo (que falta nos hace), aunque aprovechamos para (mal)grabar tres temas. Enchufamos la guitarra acústica, el bajo y los micros al equipo de voces, un Fender de 6 canales y 300W ( antecesor de este ) que hace 10 años nos costó 100.000 pelas de superoferta en la tienda de un colega de Pedro. El caso es que el aparatillo lleva salida de monitores, así que, a la par que nosotros nos oíamos bien por las pantallas, grababa a través de susodicha salida. Es un infierno intentar ecualizar cualquier cosa así. Además la salida de monitores iba a la entrada del minidisc de Silvia. Aún así tenía mucho ruido :-( y la ecualización y mezcla era horrorosa: si no se oía sólo el bajo, sólo se oía la guitarra, sino sólo la voz...
Así que por la tarde me llevé el portatil para usar un secuenciador e ir grabando cada cosa por separado. Nuestro gozo en un pozo. La salida del PA es nivel de línea y la entrada del portatil nivel de micro. Conclusión: todo sonaba megasaturado.
Pero bueno, lo importante es lo a gusto que me encuentro ensayando con Ezequiel (un monstruo de las 6 cuerdas) y con Silvia.
Además tocar con ellos me da la oportunidad de sacar todo mi arsenal de bajos, ya que tocamos desde canciones muy cañeras hasta baladas muy baladosas.
Deberíamos volver a ensayar como al principio: tandas de 7 y 9 horas. Creo que hay bastante potencial, pero tenemos que currar mucho. Además esa actitud de Ezequiel es increible. Consigue contagiarte ese entusiasmo por poder hacer cualquier cosa, ¡¡¡hasta tocar Bach!!!
Nos fuimos a cenar con Calvin (Y!), y la cena fue una especie de reunión en la que hablamos de nuestro punto de vista respecto al grupo. Un grupo no vive sólo de la música. Siempre me ha gustado compartir tiempo fuera de la música con la gente con la que toco. Siempre aporta más complicidad, más confianza y mejor entendimiento en un grupo.
El doctor dijo, volviéndose a subir (como siempre):
Si no me subo. Es sólo una micra psicológica.
¿No querrá decír "minúsculos grupitos"?
Sobre todo estuvimos ensayando los coros Ezequiel y yo (que falta nos hace), aunque aprovechamos para (mal)grabar tres temas. Enchufamos la guitarra acústica, el bajo y los micros al equipo de voces, un Fender de 6 canales y 300W ( antecesor de este ) que hace 10 años nos costó 100.000 pelas de superoferta en la tienda de un colega de Pedro. El caso es que el aparatillo lleva salida de monitores, así que, a la par que nosotros nos oíamos bien por las pantallas, grababa a través de susodicha salida. Es un infierno intentar ecualizar cualquier cosa así. Además la salida de monitores iba a la entrada del minidisc de Silvia. Aún así tenía mucho ruido :-( y la ecualización y mezcla era horrorosa: si no se oía sólo el bajo, sólo se oía la guitarra, sino sólo la voz...
Así que por la tarde me llevé el portatil para usar un secuenciador e ir grabando cada cosa por separado. Nuestro gozo en un pozo. La salida del PA es nivel de línea y la entrada del portatil nivel de micro. Conclusión: todo sonaba megasaturado.
Pero bueno, lo importante es lo a gusto que me encuentro ensayando con Ezequiel (un monstruo de las 6 cuerdas) y con Silvia.
Además tocar con ellos me da la oportunidad de sacar todo mi arsenal de bajos, ya que tocamos desde canciones muy cañeras hasta baladas muy baladosas.
Deberíamos volver a ensayar como al principio: tandas de 7 y 9 horas. Creo que hay bastante potencial, pero tenemos que currar mucho. Además esa actitud de Ezequiel es increible. Consigue contagiarte ese entusiasmo por poder hacer cualquier cosa, ¡¡¡hasta tocar Bach!!!
Nos fuimos a cenar con Calvin (Y!), y la cena fue una especie de reunión en la que hablamos de nuestro punto de vista respecto al grupo. Un grupo no vive sólo de la música. Siempre me ha gustado compartir tiempo fuera de la música con la gente con la que toco. Siempre aporta más complicidad, más confianza y mejor entendimiento en un grupo.
El doctor dijo, volviéndose a subir (como siempre):
Si no me subo. Es sólo una micra psicológica.
¿No querrá decír "minúsculos grupitos"?
No hay comentarios:
Publicar un comentario